El cantautor dominicano edita “Dulus Dominicus”, un aperitivo de su segundo LP tras el aplaudido “Un domingo cualquiera”
La de Álex Ferreira es la historia de un músico que alcanza el éxito en la emigración. Natural de Santo Domingo, vivió su infancia y adolescencia entre República Dominicana, Nueva York y Miami.
Pronto, a los 16 años, empezó a componer bajo la inspiración del brit-pop, el folk anglosajón, el rock argentino o la trova cubana, entre otras influencias.
Las comparecencias sobre los escenarios de su ciudad natal fueron ensanchando sus perspectivas y apoyos. Así, toca con reconocidos músicos dominicanos y gana varios concursos.
Bajo la inspiración del brit-pop, el folk anglosajón o la trova cubana, empezó a crear canciones a los 16 años
En 2005 abandona su carrera universitaria para viajar a España. Se asienta en Madrid, donde forma su propia banda y logra el interés de la discográfica Warner por su trabajo. De ahí salen los EPs“Serenata de plástico”(2008) y“Páginas”(2009), y en 2010 el LP “Un domingo cualquiera” que le sitúa en los carteles de festivales nacionales.
Ferreira, quien ha compartido escenarios con Xoel López, Iván Ferreiro, Kiko Veneno o Jorge Drexler, da otra vuelta de tuerca a su particular sonido –un pop con originales pinceladas que no cabe encuadrar en el pop latino– con este “Dulus Dominicus”, que cabe considerar un aperitivo de su segundo LP.
Publicado originalmente en VISADO el viernes 18 de marzo de 2011